Habitación vacía





Una muerte habita los sueños que regué lejos de aquí,
estrago que ata una cuerda al techo,
que se une a ella murmurando unas últimas palabras.

Rayo de luz que se pierde en el camino,
voz que rasga el aire de la calma,
que sobresalta y acelera los sentidos,
vuelca la oscuridad en lámparas por doquier, buscando serenidad.

Un abandono se esconde bajo la cama,
se asoma para completar su misión,
y huye dejando tras sí una estela de llanto;
polvo convertido en desesperanza que poco a poco
va cayendo desde todos los rincones testigos del desastre.

Puerta que se abre a medias mientras
una habitación vacía perfuma un aire
con la muerte colgando de su pecho,
con ventanas que miran hacia todos lados,
tratando de disimular el llanto del abandono
que en su interior pronuncia los últimos ruegos.